La piel sensible a menudo sufre irritaciones incómodas, enrojecimiento e incluso picazón. Sin embargo, con los cuidados y los productos adecuados, podemos mejorar significativamente su estado y lograr un cutis sereno y saludable. Todo lo que necesita son unos minutos de atención por la mañana y por la noche.

Comprender la piel sensible

El primer paso para cuidar la piel sensible es entender qué es lo que puede irritarla. La piel sensible tiende a reaccionar a diversos factores externos e internos. Se puede influir en algunos de estos factores de forma directa, mientras que otros se pueden adaptar para proteger eficazmente nuestra piel. Los factores de riesgo incluyen:

1.    Sustancias químicas irritantes en los productos cosméticos: Evite los productos que contengan perfumes y colorantes fuertes. Busque productos de base natural etiquetados como aptos para piel sensible.

2.    Temperatura inadecuada del agua: El agua excesivamente caliente o fría también puede irritar la piel. Se recomienda lavarse la cara con agua tibia, ni fría ni caliente, que abre suavemente los poros para facilitar la limpieza.

3.    Estrés: El estrés emocional puede manifestarse rápidamente en el aspecto de la piel. El exceso de estrés suele hacer que la piel sea aún más sensible y propensa a la inflamación. Varios tipos de técnicas de relajación, meditación, yoga o paseos por la naturaleza pueden ayudarle con la tensión nerviosa.

4.    Condiciones climáticas extremas: Las temperaturas excesivamente altas o bajas pueden irritar mucho la piel. Por lo tanto, la protección adecuada es esencial y se necesita una atención adicional en estos casos. El viento, en particular, puede resecar la piel, por lo que es recomendable utilizar cremas hidratantes varias veces al día cuando se exponga a él. También es adecuado un aerosol ionizante. Puede hidratar en profundidad de forma inmediata y también se puede utilizar como maquillaje.

Establecer los hábitos correctos para el cuidado de la piel

En el cuidado de la piel, no se trata solo de cosméticos de calidad y tecnología de limpieza, sino que la constancia importa. Su piel necesita cuidados y una limpieza profunda cada mañana y noche. El proceso de limpieza y tratamiento no debería durar más de unos minutos dos veces al día. La clave también es la secuencia de la rutina completa del cuidado de la piel, de la que hablaremos en el próximo artículo.

La paciencia trae resultados

Los milagros no ocurren de la noche a la mañana, por lo que es importante ser paciente y observar el progreso gradual. Si bien la tecnología Peeler de Reclar puede ofrecer mejoras iniciales después de unos pocos usos, la recuperación de la piel dañada para pieles muy sensibles es un proceso más largo para el que sin duda vale la pena dedicar tiempo y atención. Si está probando un nuevo tipo de cosmético, se recomienda probarlo primero en un área pequeña y, después de algunos usos, aplicarlo en todo el rostro.

Cuanto más sensible sea su piel, más cuidado se merece

La piel sensible puede parecer difícil de cuidar, pero con la selección adecuada de cosméticos y tecnología de limpieza, incluso este tipo de piel puede lograr una apariencia saludable. Recuerde que cada piel es única y lo que puede ser adecuado para una persona puede no serlo para otra. La piel sensible es más propensa a diversos tipos de irritaciones y reacciones, por lo que es conveniente mantenerla hidratada y fortalecer su barrera protectora mediante un cuidado adecuado.